Los responsables de marketing no dedican el tiempo suficiente a pensar en cómo funcionará su producto en otros idiomas o países. Como resultado, muchas empresas no involucran a su público global con contenidos que les sean familiares, no solo con contenidos traducidos, sino con una experiencia lingüística completa que transmita su marca, reputación y confianza.
A raíz de su serie «Can’t Read, Won’t Buy», CSA Research colaboró con Katar World Panel, para encuestar en su lengua materna a 8709 consumidores de 29 países.
Cuando se les preguntó si estaban de acuerdo con la siguiente afirmación:
Cuando estoy frente a la posibilidad de comprar dos productos similares, es más probable que adquiera el que tenga la información en mi idioma
Respondieron de la siguiente manera:
A pesar de la globalización y del uso creciente del inglés como idioma global, descubrieron que en 2020 las personas siguen prefiriendo consumir información en su propio idioma. Entre los hallazgos, los resultados son:
Los consumidores prefieren comprar en los sitios web en su lengua materna. El 67 % de los 8709 participantes que dijeron que no dominan el inglés, expresó su preferencia por el contenido en su lengua materna.
La información que los compradores pueden leer es fundamental en la decisión de compra. Ante la elección entre comprar productos similares, el 76 % de los encuestados elegirá el que tenga información en su idioma.
La atención al cliente en el idioma local crea relaciones más estrechas con los clientes. El 75 % de los encuestados afirma que tiene más probabilidades de volver a comprar la misma marca si la atención al cliente está en su idioma.
El informe «Can’t Read, Won’t Buy – B2C» estará disponible para los miembros de CSA Research el 30 de junio.
M21Global ha abierto una nueva sucursal en São Paulo, Brasil.
Obtenga sus traducciones para los mercados brasileño y sudamericano, con la garantía del Sello de Calidad Europeo, beneficiándose de nuestro compromiso de «Cero errores, total satisfacción».
Conozca en nuestro sitio web las opiniones espontáneas de nuestros clientes habituales y los resultados de la encuesta anual a nuestros clientes, que es requerido por nuestra Certificación de Calidad ISO 17100:2015 (el 99 % de los clientes afirma estar «satisfechos»).
Traducimos más de cien combinaciones de idiomas.
En las combinaciones entre portugués, español, francés, inglés, italiano y alemán tenemos los mejores precios, en cualquier mercado, y garantizamos una calidad sin errores.
En el ámbito del proceso de mejora continua de M21 Global, empezamos a enviar automáticamente a todos los clientes un cuestionario de satisfacción, tras la finalización y entrega de los trabajos de traducción.
El cuestionario tiene cuatro preguntas base:
1. ¿Cuál es su grado de satisfacción con nuestros servicios en general?
2. ¿Cuál es la probabilidad de recomendar nuestros servicios a un colega o amigo?
3. ¿Cuál es su grado de satisfacción en relación con la atención recibida?
4. ¿Cuál es su grado de satisfacción en relación con el servicio de traducción efectuado?
Hemos enviado cerca de 300 cuestionarios entre el 1 de marzo y el 2 de junio de 2017, y hemos recibido 58 respuestas. Es decir, una muestra de cerca del 20 % de todos los clientes de este periodo, lo que nos lleva a creer que el resultado puede extrapolarse a la totalidad del universo de nuestros clientes.
Asimismo, si tenemos en cuenta que es más probable que un cliente poco satisfecho dé su opinión que un cliente muy satisfecho, entonces estas cifras adquieren unas dimensiones realmente fantásticas, lo que nos deja muy satisfechos.
Los clientes que respondieron pueden caracterizarse de la siguiente forma:
Empresas extranjeras o multinacionales 45 %
Empresas portuguesas Lda. 22 %
Empresas portuguesas S.A. 14 %
Entidades públicas 7 %
Clientes particulares 7 %
Despachos de abogados 5 %
Y los resultados a las cuatro preguntas fueron los siguientes:
Permitir que una situación que debe resolverse se alargue en el tiempo, evitando o posponiendo una conversación difícil, puede perjudicar el clima en el local de trabajo. Los comportamientos no deseados pueden perpetuarse en el tiempo, consolidando actitudes, contagiando a otros colaboradores y haciendo que la conversación, que inicialmente podría ser fácil, cada vez sea más difícil.
Vaya directamente al grano.
Tras los saludos iniciales y la muestra de interés por la otra persona al inicio de la conversación para crear un buen clima, aborde el asunto sin más rodeos.
No dé vueltas para expresarse y no tenga prisa. Exponga los hechos o la situación que deba aclarar sin mostrar una actitud juzgadora.
Este estilo de comunicación es más abierto y menos amenazante.
Trate a su interlocutor como le gusta que le traten.
Existe la vieja máxima de que debemos tratar a los otros como nos gustaría que nos tratasen a nosotros. Pero las personas no son todas iguales y no todos los estilos de comunicación son iguales para todos. Lo que es importante para usted, puede no ser importante para los demás y, de igual forma, detalles que para usted no tienen importancia, pueden ser cruciales para la otra persona. Tenga en cuenta la persona que tiene delante e intente percibir qué estilo de comunicación es más el eficaz con ella. Trátela como le gustaría que la trataran.
En una conversación difícil prevalece la emoción.
La otra parte puede tener razón o creer que la tiene, por lo que debe darle la oportunidad de expresar su punto de vista. No asuma que usted está 100 % seguro de sus convicciones o que la otra persona está completamente equivocada. Aunque discrepe de lo que dice, en lugar de negarlo de inmediato, haga preguntas para forzar que la otra parte a reflexione y dese tiempo (a usted) para pensar sobre las respuestas apropiadas.
Cuando haya desacuerdos, debe estar preparado para escuchar, hacer preguntas de aclaración y solo después de ello expresar su punto de vista.
No es necesario hablar mucho, lo más importante es escuchar para lograr comprender o rebatir el punto de vista de su interlocutor. Muéstrese atento a lo que se le dice y anime a la otra parte a desarrollar su pensamiento. Haga preguntas abiertas que no puedan contestarse son un mero «sí» o «no». Asegúrese de que ambos se están entendiendo, reformulando lo que se ha dicho para obtener la confirmación de la otra parte.
Por encima de todo, no evite las conversaciones difíciles solo porque cree que podrán ser desagradables. Espere el mejor escenario posible, pero prepárese para el peor.
Las traducciones juradas son firmadas por un traductor, y su firma se certifica en un notario o abogado.
Una traducción jurada se constituye de las siguientes tres partes:
1) El documento o texto en el idioma original.
2) El texto traducido en el idioma de llegada.
3) Un documento firmado por el traductor, certificado por un abogado o notario, en el que declara por su honor que la traducción realizada por él es fiel a la versión original del documento.
Una traducción jurada para ser utilizada en otro país contiene igualmente la Apostilla de La Haya. La Apostilla de La Haya es un documento mediante el que la Procuraduría General de la República certifica la autenticidad de los actos públicos publicados (en este caso, la certificación de la traducción realizada por un abogado o notario). Los países que aceptan la Apostilla de La Haya son solo aquellos que han ratificado o adherido al Convenio de La Haya. El sitio web del Convenio de La Haya contiene la lista de países miembros: http://www.hcch.net/es/instruments/conventions/?cid=41.
Cabe recordar que la traducción jurada como tal incluye todos los documentos mencionados anteriormente. Ninguno de estos documentos puede ser suprimido ya que ello anularía la validez de la traducción jurada. Si solicita la traducción de un documento original que en el futuro pueda necesitar para otros fines, es aconsejable que no lo incluya en la traducción. En su lugar utilice una fotocopia legal del mismo. Ejemplos de este tipo de documentos: un certificado de nacimiento, un título universitario, declaraciones médicas, entre otros. En suma, todos aquellos documentos que son difíciles o imposibles de obtener nuevamente, o cuyo coste es demasiado alto.
No dude en contactarnos si tiene más preguntas en relación a las traducciones juradas: info@m21global.com.
1 – Está perdiendo tiempo si no se identifica. Una solicitud no identificada genera dudas y supone más de una llamada telefónica o un correo electrónico a los que tendrá que responder, lo que retrasará todo el proceso. Por ello es ventajoso identificarse desde un primer momento, porque solamente así podremos ofrecerle un presupuesto a su medida. Envíe su nombre o el de la empresa para la cual trabaja, domicilio, contacto más directo y NIF, de modo que sea posible realizar un registro de la solicitud de presupuesto. No pierda tiempo, IDENTIFÍQUESE.
2 – Está perdiendo tiempo si no especifica la lengua de destino. Puede ser un lapsus, un descuido o porque pretende traducir siempre hacia el mismo idioma, pero quien recibe su solicitud no lo sabe. Recuerde que trabajamos con decenas de combinaciones de idiomas simultáneamente. No pierda tiempo, INDIQUE LA LENGUA DE DESTINO.
3 – Está perdiendo tiempo si no indica cuál es el plazo real que tiene. ¿Necesita su traducción para ayer y, por eso, nos dice que es muy urgente? Especifique una fecha de entrega en la que realmente necesite el trabajo. Pedir plazos innecesariamente cortos no le ayudará, solamente complicará y encarecerá la traducción. Al indicar el plazo de que dispone nos permite entregarle el servicio más eficaz. No pierda tiempo, INDIQUE SU PLAZO REAL DE ENTREGA.
4 – Está perdiendo tiempo si no envía el contenido que desea traducir. Una solicitud que solamente hace referencia al número de palabras, de páginas o de líneas que traducir no se puede presupuestar. Necesitamos analizar el texto que desea traducir. En un presupuesto, hay varios factores que influyen en el precio final, como la longitud del texto, la complejidad de la materia, el grado de especificidad técnica o incluso el formato en que se debe entregar. Si tiene el documento en el formato original como, por ejemplo, Word o InDesign, no nos envíe un PDF. Ahorre tiempo y dinero, ENVÍE UN ARCHIVO EN FORMATO EDITABLE.
5 – Está perdiendo tiempo si no aclara nuestras dudas. Al realizar su solicitud, intente tomar conocimiento del proceso de traducción. El trabajo pasa por varias etapas, no es simplemente pasar el texto a otro idioma. No considere excéntricas las solicitudes de la empresa de traducción, tales como la necesidad de la adjudicación por escrito, entrega de un glosario de los términos usados en su empresa, o el contacto de quien pueda aclarar las dudas. Estas comunicaciones facilitan y agilizan nuestro trabajo, y contribuyen a una traducción de la mejor calidad. No pierda tiempo, RESPONDA A NUESTRAS SOLICITUDES.
¿Qué tal si deja de lado viejos hábitos y acaba bien el año?
Al comienzo de cada nuevo año, la mayoría de la gente redacta una lista con los objetivos que quiere cumplir. Sin embargo, serán pocos los que se materialicen antes de diciembre. Uno a uno, gran parte de los propósitos caerán en el olvido a lo largo del año, o en muchos casos, incluso en enero.
Empresarios, traductores y otros profesionales podrían ser más felices si abandonaran algunos malos hábitos que los perjudican, restan productividad y les impiden alcanzar éxito y satisfacción personal.
1. Abuso de las redes sociales y (peor aún) su uso durante la jornada laboral
Las redes sociales son la principal causa de procrastinación en el puesto de trabajo. Perderse entre publicaciones de Facebook puede ser divertido, pero conduce a la inoperancia y a la falta de concentración. No entre en Facebook, Instagram, Twitter y otras redes sociales en horario laboral. Igualmente, desconecte las notificaciones en su teléfono. Si alguien tiene una urgencia apremiante, se pondrá en contacto con usted a través de una llamada, no de un mensaje.
2. No sea multitarea
Un estudio realizado por la Universidad de Utah, en Estados Unidos, muestra un resultado bastante sorprendente: solo el 2 % de las personas tiene capacidad para realizar más de una tarea a la vez. Según esta investigación, el cerebro de los llamados supertasking es diferente del 98 % restante de la población. Siendo así, dado que la probabilidad de formar parte del grupo de los que realmente pueden llevar a cabo más de dos tareas a la vez es reducida, no malgaste tiempo intentándolo. Cuando quiera concentrarse en lo que tiene que hacer, cierre todas las ventanas del navegador y los programas de su ordenador, excepto las que sean indispensables para realizar la tarea que tiene entre manos.
3. Nada de comparaciones
Nunca se puede ganar en el juego de las comparaciones. Siempre existirá alguien más inteligente, más guapo, más rico y (aparentemente) más feliz. Los profesionales deben ser capaces de centrarse en sí mismos, en sus objetivos, salud y estado de ánimo.
4. Acabe con las protestas
De hecho, no vale la pena quejarse constantemente de todos los males del mundo y protestar por todo y por nada. Preste atención a lo que dice. Sus palabras no solo le afectan a usted, sino también a todos los de su alrededor. Cuantas más cosas más positivas diga, más cosas positivas sucederán. El profesional debe ser optimista.
Un cierto grado de escepticismo siempre es positivo, pero el pesimista no cambia el mundo, no motiva a los demás, ni tiene ideas innovadoras. El pesimista solo transmite su estado de ánimo a las personas de su entorno.
5. No pierda el tiempo con personas negativas
Si determinadas personas no lo aman ni lo apoyan, apártelas de su vida. Sin embargo, no se trata de buscar un enfrentamiento, sino de dejar de estar disponible para ellas. Estas personas no notarán su falta de disponibilidad, pues están muy centradas en sí mismas.
6. Líbrese de reuniones largas e innecesarias
Menos reuniones significan más productividad. Seleccione la reunión, exponga sus ideas, trate los puntos del orden del día y una vez hecho, siga con lo que tiene que hacer. Las reuniones deben ser productivas. Cree un orden del día para cada reunión con los temas que deba abordar. Cuando verifique los temas que tratará, pregunte también a sus compañeros en qué tarea están trabajando y cuál han finalizado ya. Este método funciona mejor y reducirá a la mitad el tiempo empleado en reuniones.
7. Deje de sabotearse a sí mismo
Muchos profesionales viven la vida escuchando una voz en su cabeza que constantemente les repite que “no son lo suficientemente buenos” o que “no son capaces”. Es importante dejar atrás este hábito y estimular otro más positivo que le haga ser productivo. Trabajar, hacer ejercicio y contribuir de forma positiva a la sociedad pueden ser algunos de los hábitos que pueden hacerle sentir más feliz, realizado y exitoso.
8. No se jacte de los objetivos que todavía no ha cumplido
En una conferencia de TEDGlobal en 2010, el empresario Derek Sivers explica la siguiente idea: cuando alguien anuncia al mundo los objetivos que pretende alcanzar, el cerebro entiende que ya los ha conseguido. Esto implica que el esfuerzo y la concentración necesarios para alcanzarlos será inferior.
9. Preocúpese solo de lo que está bajo su control
Si es empresario, recuerde que existen un sinfín de variables que están fuera de su control. No sirve de nada pasar las noches pensando y preocupándose por lo que no es posible resolver. Es una pérdida de tiempo, energía y recursos. Solo podemos controlar lo que comemos, lo que pensamos y lo que hacemos.
En lugar de centrarse en nuevos hábitos que adoptaremos o en nuevos objetivos que queremos perseguir, centrémonos en esos hábitos que nos frenan y nos impiden ser mejores e intentemos cambiarlos poco a poco o eliminarlos de nuestra vida para poder ser más productivos. Todavía quedan 5 meses hasta nochevieja. Si conseguimos acabar con algunos de estos hábitos negativos, habremos conseguido tener un año de éxito y más acorde con nuestras expectativas.
Un estudio realizado por psicólogos de la Universidad de Harvard reveló que las personas pasan el 47 % del tiempo que están despiertas pensando en algo diferente a lo que están haciendo, por lo que esa dispersión de la mente las hace infelices.
«La habilidad de pensar sobre lo que no está pasando es una conquista cognitiva que tiene un elevado coste emocional» señalan los autores Killinsworth y Gilbert, los psicólogos de Harvard que llevaron a cabo el estudio.
Al contrario que otros animales, los seres humanos dedican mucho tiempo a pensar sobre lo que no está pasando a su alrededor: analizando eventos que sucedieron en el pasado, que pueden suceder en el futuro, o que puede que nunca sucedan.
Las personas son más felices en el acto del amor, haciendo ejercicios o conversando. Y son menos felices cuando descansan, trabajan, o cuando usan un ordenador en casa.
Dicen los autores que «el nivel de dispersión de la mente es un excelente predictor de la felicidad de las personas», y la frecuencia con la que nuestras mentes abandonan el presente, y hacia dónde van, es un mejor indicador de la infelicidad, que las actividades que estamos de hecho desarrollando.
El estudio muestra que la divagación mental es generalmente la causa, y no la consecuencia, de la infelicidad.
«Muchas tradiciones filosóficas y religiosas enseñan que la felicidad puede encontrarse viviendo el momento presente, por lo que los profesionales son entrenados para resistir a la divagación de la mente, para “estar aquí y ahora”. Estas tradiciones sugieren que una mente dispersa es una mente infeliz», según los autores.
La creciente práctica de disciplinas orientales, como el yoga o la meditación, corresponde sin duda a una necesidad interior de las personas.
Este nuevo estudio sugiere, según los autores, que estas prácticas son acertadas.
Pero, ¿cómo podemos entrenar nuestras mentes para estar más presentes?
Hacer de cada día un compartimiento estanco. Analizar el pasado o preocuparse por el futuro es completamente inútil. Piense en el futuro únicamente cuando necesite hacer planes. Registre el plan y sígalo desde que se muestre apropiado. Y si el plan se vuelve inadecuado con el tiempo, reformúlelo. Haga planes, pero no se preocupe. Observe que la palabra «preocupación» quiere decir «pre-ocupación» (del latín praeoccupatiōne-, «ocupación previa»).
Viva el presente. Si está conduciendo, observe las señales, su velocidad, la distancia al vehículo de delante y maniobre con cuidado. No piense en la reunión que va a tener, ni en lo que sucedió antes de salir de casa. Escuche música y no las noticias. Ponga un CD relajante.
Cuando quiera estar al día de lo que pasa, escuchar las noticias o leer el periódico, entonces hágalo, pero solo haga eso.
Si está con personas concéntrese en ellas y en la conversación que está teniendo. No esté ausente.
Antes de llegar al trabajo, por ejemplo, en el coche cuando aparca, o de camino en el tren, intente pasar diez minutos prestando atención al momento presente. Cierre los ojos, relájese y, sentado en una postura recta, céntrese en la respiración. Inspire y expire, inspire y expire. Si fuere el caso, cuente hasta diez con cada uno de estos movimientos. Repare en que muchas veces su mente se distraerá, siguiendo cualquier pensamiento. Cuando repare en que está distraído, vuelva a centrarse en la respiración. Sobre todo no se preocupe si su mente siempre se está distrayendo, aprecie estos momentos de calma y concentración.
Defiéndase del correo electrónico: trátelo como el correo tradicional, que solo llega una vez al día. No lea el correo electrónico repetidamente (salvo si su trabajo está basado en el correo que recibe). No permanezca a las órdenes.
A lo largo del día, intente mantener su atención en el momento presente y en las tareas que efectivamente está realizado, y en aquello que efectivamente está sucediendo en su día. Intente buscar momentos en los que parar, respirar hondo y centrarse en el momento presente. Después del almuerzo, pruebe a colocar una alarma en el móvil para que suene una vez cada hora. Y cada vez que el móvil suene, pare lo que esté haciendo y concéntrese en la respiración durante un minuto. Mantenga la mente centrada en la respiración («en el momento presente»).
Por último, al final del día, después de salir del trabajo y de camino a casa, vuelva a detenerse durante diez minutos. Apague la radio y el teléfono, y durante ese tiempo, simplemente esté presente. Deje que todos los pensamientos que aparecen pasen y fluyan. Céntrese en la respiración. De este modo, se liberará del estrés del día en el trabajo, y podrá prepararse para volver a casa y estar de hecho presente con su familia.
Disponemos de los recursos técnicos y humanos necesarios para crear excelentes traducciones con una calidad inigualable. En el ámbito de empresas y negocios, como ejemplo de un tema recurrente, ya hemos traducido más de 50 millones de palabras, destacando especialmente las áreas jurídica, fiscal, económica, financiera y administrativa, en más de 25 idiomas…
Además de los idiomas tradicionales —portugués, inglés, francés, español y alemán—, también traducimos a todas las lenguas de la Unión Europea, como el italiano, el flamenco o el danés, entre otros. Además, traducimos al ruso, el árabe o el chino.
Los clientes que se lanzan a la internacionalización y las decenas de startups que se han apoyado en Multilingues, han recibido un servicio de calidad superior, pagando menos. Ofrecemos todos los servicios de traducción escrita, reescritura (copydesk), pruebas finales para artes gráficas, para los mercados nacional e internacional, estudios de mercado y captación de contactos extranjeros, además de proporcionar apoyo a la importación y exportación, en todas sus vertientes.
Internet
El sitio web de su empresa es hoy su escaparate y, cada vez más, un privilegiado punto de venta. Por ello, es importante que el sitio web transmita el mensaje adecuado en los idiomas importantes del negocio y que sea funcional, intuitivo y fácil de usar. Además, debe estar preparado, desde su creación, para que pueda encontrarse en la primera página de resultados de los motores de búsqueda (SEO). Un sitio web que no se encuentra es un sitio web invisible. Y un sitio web invisible es un sitio web que no vende, acumulando pérdidas.
Y también es aquel que solo está en español. Cada vez más residentes en España tienen otra lengua materna diferente al español. La traducción de su sitio web a los principales idiomas no encarece sustancialmente su coste, y le proporciona inmensos beneficios de visibilidad en nuevos mercados.
Si lo desea, también podemos revisar y reescribir sus contenidos, a fin de optimizar su sitio web para que se encuentre en la primera página.
Con Multilingues, ¡la internacionalización será más efectiva y económica! ¡Y sobre todo será de mejor calidad!
Para lograr un objetivo determinado, es posible que una empresa o un particular necesiten una traducción. Vivimos en un mundo global en el que nuestro cliente, nuestro proveedor, nuestro socio, o incluso nuestro interlocutor, pueden hablar una lengua extranjera.
Son muchas y muy variadas las finalidades de una traducción, como, sin ser exhaustivos, pero ofreciendo ejemplos de las necesidades que se nos presentan todos los días:
catálogo para los clientes finales (B2C, destinatarios individuales: decisiones de bajo riesgo);
catálogos para los clientes de negocios (B2B, destinatarios colectivos: decisiones con mayor riesgo);
especificaciones técnicas;
manuales técnicos (para profesionales) o manuales para el usuario (consumidor final);
solicitudes de autorización para la introducción de medicamentos o pruebas de nuevos medicamentos;
contratos (finales o documentos de trabajo);
demandas judiciales;
publicidad;
relaciones públicas;
boletines informativos;
publicación en periódicos generalistas o en revistas profesionales o científicas;
publicación de libros;
publicación en la página web de la empresa o en redes sociales;
optimización de contenido de sitios web en motores de búsqueda (SEO);
propuestas para licitaciones;
CV de empleados;
documentos personales o de negocios;
certificados;
informes de auditorías;
y un largo etcétera.
La finalidad y el valor del resultado pretendido determinan el nivel de servicio o el estilo que se va a utilizar, si es necesario su reescritura o una edición gráfica final, entre otras actividades.
Antes de contratar a una empresa de traducción, debe asegurarse de que cumple los requisitos para ofrecerle el servicio solicitado. La cantidad de proveedores de servicios de traducción en el mercado es alta, y muchos pretenden ofrecer un servicio que no son capaces de proporcionar. Ganar experiencia, conocimientos técnicos, recursos tecnológicos y las bases de datos terminológicas, así como la formación de los recursos humanos, requieren una alta inversión y mucho tiempo.
Multilingues ofrece el servicio más adecuado al mejor coste para cada propósito. Llevamos 10 años presentes en el mercado y hemos traducido más de 60 millones de palabras de los ámbitos más diversos y con objetivos distintos.
Nuestra empresa cumple la norma de calidad ISO 17100, específica para la actividad de la traducción.
Al solicitar una traducción, especifique siempre su finalidad, el plazo más realista que desea (un plazo innecesariamente ajustado conllevará costes más elevados e imposibilitará el servicio más apropiado) y cualquier otra especificación única de su empresa y de su realidad.
Al encargarnos su traducción, puede dormir tranquilo. Ni su empresa ni su posición estarán en peligro.
Si tiene alguna pregunta sobre la traducción, o si encuentra que no satisface sus especificaciones, aclararemos sus dudas o volveremos a hacer el trabajo hasta que quede satisfecho, sin ningún coste adicional. Nuestro servicio posventa solo termina cuando el cliente dé por finalizado el proyecto.
Estamos aquí para usted. Póngase en contacto hoy mismo con nosotros y le presentaremos las propuestas más adecuadas.